El fiscal general de la República, Tarek William Saab, ofreció detalles del nuevo plan desestabilizador de la extrema derecha venezolana, revelado por el grupo paramilitar colombiano Autodefensas Conquistadoras de la Sierra.
Durante una rueda de prensa, Saab explicó que un informante develó que las conversaciones con el grupo paramilitar iniciaron hace dos meses en La Guajira colombiana, donde fue enviado un primer emisario que se identificó como miembro de la oposición venezolana y mostró fotos con conocidos dirigentes de este sector.
Refirió que después se realizaron tres reuniones en un restaurante de Maicao. A ellas siempre asistieron tres personas: dos blancos y uno trigueño, sin barbas y de una estatura promedio de 1,75 cm, según lo descrito por el informante citado por el fiscal.
Estos sujetos pidieron a la organización paramilitar atentar contra el presidente Nicolás Maduro en alguno de los actos de calle, o atacar la infraestructura eléctrica del estado Zulia, especialmente en los últimos días de campaña para tratar de dejar la mayor parte del país sin luz.
Asimismo, les solicitaron que, en caso de perder la oposición en las elecciones del 28 de julio, se infiltraran en marchas para causar violencia, puesto que no van a reconocer los resultados.
De acuerdo con Saab, estas personas mostraron a los paramilitares mapas señalando la infraestructura eléctrica que querían atacar, así como fotos del Palacio de Miraflores.
Además, ofrecieron “asilo político cuando ellos tomaran el poder a los que presuntamente estuvieran con ellos en esta actuación”. Durante estas reuniones, agregó el fiscal, no se llegó a concretar un monto de pago.
